Estela Smania | Elegía para E.
Se ha caído sobre los cerámicos
de la cocina.
Lo encuentro tendido
como un árbol
que fue refugio
y sombra.
Me tumbo a su lado
le cuento
que el domingo vendrán
los nietos
y comeremos juntos.
Él sonríe.
Yo ruego
que alguien llegue
y nos regrese
al mundo
/
No hay barca
no hay Caronte.
En caja de madera se va
hacia la nada.
Voy a inventar la barca
y el remero
para hacer de su muerte
un largo viaje.
Se lo debo
/
Le gustaban
las manzanas con vino dulce
y con canela.
Yo miraba
la alegría
en su boca
y reconocía en su mirada
la impaciencia
para que nadie comiera
aquello que era suyo
aquello
milagrosamente
inacabable.
Ahora
por costumbre
sigo trayendo a casa
la ventura
de las manzanas rojas.
Para nadie.
O sólo para
que aquel olor
se quede
y me acompañe.
Estela Smania (Paraná, Entre Ríos), Elegía para E. Viento de Fondo. Córdoba. 2018.
Maravilloso poema!
ResponderBorrarBellísimo!
ResponderBorrar