Else Lasker-Schüler | Una canción de amor
Sobre tus mejillas descansan
Sobre tus mejillas descansan
palomas doradas.
Pero tu corazón es un torbellino.
Tu sangre corre como mi sangre.
Dulcemente,
junto a los frambuesos.
Oh, cómo pienso en ti...
pregúntalo a la noche.
Nadie puede jugar tan bien
con tus manos.
Ni construir castillos, como yo,
con dedos de oro.
¡Oh, fortalezas de altas torres!
Somos piratas, entonces.
Cuando estás conmigo
me siento enriquecida.
Me tomas de tal modo junto a ti
que veo estrellarse tu corazón.
Salamandras irisadas
son tus entrañas.
Estás hecho de oro,
y todos los labios contienen el aliento.
muy muy muy
ResponderBorrarmuy satisfactorio je. saludos.
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