"soy una soledad desnuda amarrada a un poste".
roberto piva, paranoia (1963). foto de 1961.
@nulubonsai
Roberto Piva | Paranoia
La Piedad
Yo rugía en los poliedros de la Justicia mi momento abatido
en la extrema
palizada
los profesores hablaban de la voluntad de dominar y de la
lucha por la vida
las señoras católicas son piadosas
los comunistas son piadosos
los comerciantes son piadosos
sólo yo no soy piadoso
si fuese piadoso mi sexo sería dócil y sólo se erguiría los
sábados por la noche
sería un buen hijo mis compañeros me llamarían
culo-de-fierro y me
harían preguntas ¿por qué el barco
flota? ¿por qué el clavo se hunde?
dejaría proliferar una úlcera y admiraría las estatuas de
fuertes dentaduras
iría a bailes donde no podría llevar a mis amigos pederastas
o
barbudos
me universalizaría en el sentido común y ellos dirían que
tengo
todas las virtudes
no soy piadoso
nunca podré ser piadoso
mis ojos resuenan y se tiñen de verde
Los rascacielos de carroña descomponen los pavimentos
Los adolescentes en las escuelas bufan como perras
asfixiadas
arcángeles de azufre bombardean el horizonte a través de mis
sueños.
Poema Porrazo
Estoy harto
de muchas cosas
no me
transformaré en suburbio
no seré una
válvula sonora
no seré paz
quiero la
destrucción de todo lo que es frágil:
cristianos fábricas palacios
jueces patrones y operarios
una noche
destruida cubre los dos sexos
mi alma
zapatea hecha una loca
un tiro de
máuser atraviesa el tímpano de
de los ciempiés
el universo
es escupido por el culo sangriento
de un Dios-Perra
las
vísceras se conmueven
preciso
disipar el encanto de mi viejo
esqueleto
preciso
olvidar que existo
mariposas
perforan el cielo de cemento
me
atrinchero en el Arco Iris
Ah volver
de nuevo a la ventana
perder el mirar en los tejados como
si fuesen el
Universo
el girasol
de Oscar Wilde atardece sobre los techos
necesito
partir un día hacia muy lejos
el mundo
exterior tiene mucha prisa para mí
San Pablo y
Rusia no pueden parar
¿cuando yo
iba al colegio Dios se tapaba los oídos ante mí?
la Muerte
me mira desde la pared por los ojos podridos
de Modigliani
me gustaría
incendiar los vellos púbicos de Modigliani
mi alma
loca apunta hacia la Luna
vi a los
profesores y sus cálculos discretos ocupando
el mundo del espíritu
vi niñitos
vomitando en los radiadores
vi
lapiceros dementes huertas tapas de inodoro
abro los
ojos las nubes se tornan más duras
traigo el
mundo en la oreja como un pendiente inmenso
la locura
es un espejo en la mañana de pájaros sin Aliento
Roberto Piva (São Paulo, 1937 – 2010), Paranoia. Traducción de Edgar Saavedra. Nulú Bonsai. Buenos Aires. 2016.
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